Controles de tránsito durante la Noche de la Nostalgia dieron buenos resultados y hubo “buena conducta” de los conductores

La Dirección de Tránsito desarrolló un exitoso operativo de fiscalización durante la Noche de la Nostalgia, en cuyo transcurso 15 controles de espirometría resultaron positivos. Durante las horas previas, se llevó a cabo una fuerte campaña de información y concientización acerca de las graves consecuencias de conducir bajo efectos del alcohol.

Trabajo en días previos

Durante los días previos a una nueva edición de la Noche de la Nostalgia, la Intendencia llevó a cabo una amplia campaña de difusión orientada principalmente a generar conciencia respecto a las graves consecuencias de conducir bajo efecto de bebidas alcohólicas y alentar a la instrumentación de “conductores designados”.

Esta campaña se realizó en forma complementaria con lo que ya se viene realizando en coordinación con instituciones educativas, donde se trabaja principalmente con docentes y directores, dado que constituyen un nexo válido con los estudiantes.

Control en lugares estratégicos

El encargado de la Unidad de Movilidad Urbana de la Intendencia, Ricardo Coria, informó que, en colaboración con la Brigada de Tránsito de la Policía, durante la noche del 24 de agosto se establecieron tres puestos de control en “zonas específicas” de nuestra ciudad, apuntándose primordialmente a fiscalizar el consumo de bebidas alcohólicas entre los conductores.

Entre las 4 y las 6 de la madrugada del 25 de agosto, en enclaves estratégicos, se llevaron a cabo 32 pruebas de alcoholemia, registrándose 15 resultados positivos.

Coria explicó que los controles de alcoholemia no se realizan en forma exhaustiva, sino que se realizan tras evaluar la situación y cuando el conductor exhibe signos de haber consumido bebidas alcohólicas.

Agregó que el flujo vehicular durante esa noche estuvo apenas por encima del habitual para un fin de semana y la mayoría de los conductores manifestó “una muy buena conducta” y buena predisposición a colaborar con los inspectores.

Además de las pruebas de alcoholemia, en los puestos de control, como es habitual, se solicitó licencia de conducir y documentación del vehículo.

Los inspectores también constataron una intensa circulación de taxis y también la instrumentación frecuente de conductores designados, lo que da cuenta de una actitud más responsable.